Santa Teresa procesionó por las calles de Malagón.

La procesión por las calles de Malagón con la imagen de Santa Teresa de Jesús supuso el culmén de un intenso fin de semana plagado de emociones y devoción hacia nuestra Santa.

Así a las 20 de la tarde las autoridades se reunieron en la iglesia del Monasterio para salir en procesión por las calles de Malagón.

Este año los malagoneros hemos tenido el honor de contar con la presencia de Ignacio Cosidó, Director General de la Policía en España y que tiene entre sus funciones, dirigir y coordinar los servicios y los órganos centrales y periféricos del Cuerpo Nacional de Policía.

Como es normal la presencia de una figura tan importante entre nosotros arrastró a números autoridades militares, tanto de la Policía Nacional, Guardia Civil, Guardia Real y Policia Local.

Adrián Fernández Herguido, alcalde de Malagón , José Alberto Martín Toledano, diputado nacional y el resto de Concejales de la Corporación Municipal formaban el resto de autoridades.

Delante de la imagen el presidente de la Cofradía de Santa Teresa de Jesús, Alberto Monteagudo, acompañado de los miembros de la Hermandad y portadores.

También participaron en esta procesión las Reinas y Damas Infantiles y Juveniles y la Dulcinea de Ciudad Real, Eva María Masías Avis.
Como hemos dicho la procesión salió alrededor de las 20 horas y en cuanto la imagen de Santa Teresa apareció por la puerta de la Iglesia del Monasterio y la Banda Municipal de Música tocó los acordes del himno nacional de España, todo fueron emociones en torno a nuestra patrona; el fervor que despierta esta figura es incomparable, sobre todo en nuestro pueblo.

Todo el recorrido estuvo plagado de vecinos y visitantes que no se querían perder el discurrir de Santa Teresa llenando las calles de nuestra localidad.

Su paso por puntos neurálgicos claves en las procesiones, tales como la Plaza del Ayuntamiento , la Glorieta de Melchor Cano, el Santo, la Cruz Verde, y el Remedio, lugar en el que finalizó la procesión y donde se dio inicio a los fuegos artificiales en su honor, despertaba caras de admiración y veneración. Solo Teresa de Jesús consigue que esto sea posible.

Las filas con las velas que alumbraban a la Santa eran interminables, incluso llegaban personas a casi hasta el final del recorrido cuando la imagen con Santa Teresa no había hecho nada más que salir del monasterio.

En definitiva una explosión de devotos y de admiración a una mujer a la que amamos en el pueblo de Malagón y que año tras año consigue que nuestra fe en ella permanezca imperturbable.